APROXIMACIONES A TACNA 1

 [Otro refrito. Con toda esperanza y algo de temor espero un mentís de mis paisanos a mis opiniones en la que digo que Tacna nunca ha sido grande, pero que sea este uno inteligente y no demasiado exaltado. Agosto de 2011.]

De  08-12-08

Comparados en tamaño y población la Tacna a la que arribó mi abuelo Víctor desde su  Puno natal, es inmensamente mayor en extensión urbana, población e ingresos. A pesar de ello –pues Tacna no es la única que ha cambiado-, continúa siendo pequeña frente a las otras urbes peruanas*.

Teniendo en cuenta esto, pregunto de la siguiente manera, en cuanto tacneño: ¿Nuestra situación va  a permanecer siempre así, con un papel secundario en el contexto peruano, e incluso en el sur-peruano, o es posible elevarnos sobre nosotros y nuestros vecinos?

La motivación para aventurarme  escribir todo esto ha surgido luego de un chasco. Al dirigirme a otra ciudad y deja por vez primera mi valle, el deslumbramiento que produjo en mí la nueva ciudad no tardó en desvanecerse.  De pronto, debido a mis reiteraros y fugaces retornos a Tacna, comencé anotar que en cada una de mis jornadas de vuelta, siempre había algo nuevo en la Ciudad Heroica: casas, negocios, pistas, fachadas, luces, restaurantes, rascacielos de cuatro pisos, galerías, etc. Ya de retorno a mi nuevo hogar, este permanecía tal y como la había dejado. A diferencia de mi ciudad natal que parecía cada vez más bella y próspera, la otra en cambio simplemente no se hacía más grande. Mi pensamiento razonaba que, entonces, pronto Tacna sobrepasaría a Arequipa –que es allí donde me mandó la fortuna- y se haría, por méritos propios del timón del Sur. Sin embargo, esta ideación simplista pronto chocó con la realidad, pues de acá a un solo año, Arequipa también empezó a construir.

Lo que venía obrando Tacna (a propósito, el movimiento inicial ha decrecido enormemente en estos días) ya no encandilaría tanto a este viajero al observar lo que acontecía en la ciudad del Misti en mucho menos tiempo.

Pensado con serenidad, resulta natural lo acaecido. El crecimiento económico en el Perú, con todo y su desigual distribución, no es falacia** , y genera un ´chorreo´ hacia las cuatro esquinas del país. Este fenómeno se suscita en unos lugares antes que en toros. Tacna, ciudad comercial y algo ajena de querellas sociales, no ha puesto mayores obstáculos a la general tendencia y por ello ha visto obreros en labor y ladrillos aquí antes que en Arequipa. Pero, después de todo, tenía que llegar a ella; y aquí debemos tener en cuenta otro punto: a unos lugares llega más que a otros. Por ser más grande, es lógico que  la Ciudad Blanca reciba y genere más que Tacna. 

Ocurre que yo no era antes tan lógico; así de simple.

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* Estatuto que, francamente, no se modifica desde el momento que tenemos noticias de ella. 

 **Salvo para algunos ignorantes o desadaptados sociales.