Esta mañana, unos pequeños amigos me hicieron recordarte, querido blog. Creo que hace mucho tiempo fue nuestra última cita. Te pido disculpas. No es mi intención dejarte abandonado; tú sabes bien cuánto me gusta escribirte. Sin embargo, sabes también que estoy ocupado; no es fácil hacer el trabajo que he escogido para mi vida.
Sabes que estoy flaco y me canso con facilidad; que falta poco para que me lleve Emergencias; que con las justas y duermo; que tengo mil y un deberes. ¿Qué te parece? Dirás que estoy poniendo excusas. Puede ser. Déjame desahogarme por esta vez, por favor. Antes las cosas eran más fáciles. A veces, quisiera volver a esa época sin grandes responsabilidades. Solo tenía que cumplir algunas tareas que me dejaban mis profesores, lavar mi ropa y eso era todo. Tenía el tiempo de sobra para hacer tantas cosas. ¡Si tan solo hubiera sabido aprovechar todo ese tiempo! Tiempo para mí, para mis caros, para cumplir mis pocos sueños. De veras que a veces quisiera retroceder el tiempo.
Pero, pensándolo mejor, todo lo pasado en estos pocos años me ha servido de experiencia y todo el tiempo que he perdido por descuidado y flojo me ha enseñado a no desperdiciar el presente que vivo ahora. Me encanta lo que hago y no lo cambiaría por otros ratos libres y divertidos, ratos para mis antiguos grandes planes y fiestas; no lo cambiaría porque lo que hago hoy es algo grande, algo que de verdad vale la pena.
Blog, Tacnamanta, ojalá y me entiendas. Ya tendremos mejores momentos para lograr nuestros propios planes. Paciencia y salud por nosotros y por nuestra Tacna amada. Tenemos ahora la tarea de sacar un mejor país. Yo me apunto; haré mi mejor esfuerzo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario